Aprender a girar snowboard

Si has practicado los ejercicios que proponemos en la lección anterior de nuestro manual de snowboard estarás en condiciones reales de realizar tu primera bajada con tranquilidad, ya que estarás listo para controlar la velocidad de la tabla según la presión que ejerzas sobre ella y según la inclinación que le demos al canto que apoya en la nieve. Si somos capaces de reducir la marcha de la tabla hasta casi parar de estas formas es el momento de aprender a girar. Incluso si es una bajada pronunciada, con hielo o con mucho tráfico de gente, saldrás vivo del intento.

 

Superar el miedo a girar

Lo primero que queremos es concienciarte de que, para hacer un giro, se necesita en algún momento que la tabla se dirija hacia la línea de máxima pendiente.

Te decimos esto porque en los primeros giros todo el cuerpo te dirá a gritos que es una mala idea dirigir la tabla hacia el «abismo». Pensamos en ejecutar un giro vamos poco a poco colocando la tabla en el sentido de la pendiente pero, cuando queda poco para iniciar el giro, nos entra el miedo y abandona su ejecución. Lo único que conseguimos es acelerar muchísimo la tabla, ya que se mantiene mucho tiempo en sentido de la pendiente, y frustrarse por no haber conseguido girar. Si vas a girar, ¡hazlo!

Otros snowboarders principiantes reaccionan de otra forma ante ese miedo. Intentan cambiar los cantos de forma demasiado rápida. Lo único que consiguen es realizar un carve que acelera la tabla aún más.

En algún momento tenemos que dejarnos llevar por un canto y caer libremente durante uno o dos segundos antes de comenzar a deslizarnos sobre el otro canto. Estos segundos parecen horas, pero no hay que tener miedo. Sigue los pasos que te indicamos a continuación y sé decidido pero utilizando movimientos suaves.

 

La esencia del giro en snowboard

La esencia del giro coincide con la propia esencia del snowboard. Es un conjunto de sensaciones en el que entran las fuerzas centrífugas y de la gravedad junto con tu cuerpo.

Debes concentrarte en sentir los movimientos de tus tobillos, rodillas, caderas y hombros. Es un juego de movimientos y sensaciones que tu cerebro debe recoger y asimilar poco a poco, hasta que consigas hacerlo de manera inconsciente.
Curva Frontside y Curva Backside

La curva frontside. Para realizar un giro en frontside tenemos que estar realizando una diagonal back, es decir, una diagonal apoyando el canto trasero de la tabla. Llevamos las piernas un poco flexionadas, vista hacia donde nos dirigimos y acompañamos el giro con un movimiento de hombros, rodillas y cadera. El giro realizamos es el de apoyar el canto delantero o front, por lo que la curva se llama curva frontside.

La curva backside. En este caso iniciamos la maniobra con una diagonal front (con el canto delantero de la tabla) para realizar un giro con el canto trasero, por lo que la curva se llama backside.

 

 

Clases de giros en snowboard

A pesar del título de este apartado no existen clases de giro propiamente dichas, es decir, no esperes una enumeración. Y es que en realidad, a medida que vayas aprendiendo y perfeccionando la ejecución de los giros realizándolos más sencillos y más suaves cada vez, vas a empezar a experimentar y descubrirás que la forma de hacer snowboard varía en función de que cambies ligeramente la forma de realizar un giro.

Tendrás que utilizar tu creatividad en lugar de ejecutar siempre el mismo tipo de giro. Haz giros de distintos tamaños y formas y con diferentes velocidades. Varía también el ángulo con el que realizas tus giros. Al principio debería ser ligero al principio para irse pronunciando más a medida que vayas ganando seguridad. Después busca añadir más inclinación del canto y más velocidad… Las combinaciones son ilimitadas y cada vez que cambies un parámetro harás un tipo de giro diferente.

Aprovecha que estás aprendiendo. El aprendizaje es la mejor fase de cualquier deporte. Disfruta del snowboard. Pero… de momento… vamos a aprender a girar!!!

Teniendo en cuenta todo lo dicho anteriormente vamos a mencionar dos tipos de giro que se diferencian claramente: Los giros derrapantes y los giros en los que se utilizan los cantos: el carving.

Por supuesto que los giros en los que se utilizan los cantos son mucho más estéticos, pero eso no significa que los giros derrapantes sean malos o erróneos. Son simplemente otra herramienta para manejarse en cualquier tipo de terreno o situación en las bañeras o junto a los árboles. Lo que mejor va a funcionar es una combinación de giros deslizantes y carvings.
Curva elemental de snowboard. Planear sobre la nieve

La curva más sencilla que podemos realizar en snowboard es aquella en el que el giro se produce sin apoyar prácticamente el canto y realizando un giro derrapante.

Para realizar este tipo de giro debes rotar los hombros y el tronco (nunca los brazos) en el sentido de la curva que desees efectuar. Este conjunto de movimientos se transmite a la tabla a través de la cadera y de las piernas, logrando así ejecutar el giro. Los brazos deben permanecer abiertos en busca del equilibrio pero nunca utilizarlos para girar. Es bueno que el brazo delantero indique la dirección a la que queremos dirigirnos a la vez que miramos en esa dirección. Un error muy habitual es intentar forzar el giro moviendo los brazos en aspa.

Con un poco de práctica vas a realizarlo de forma automática.

 

Curva básica de snowboard. Girar usando los cantos

Es una curva más compleja. El movimiento característico de este tipo de giro es el de flexión y extensión de las rodillas y tobillos. A continuación intentaremos explicar cómo se ejecuta este giro:

Imagínate a un snowboarder finalizando uno de sus giros. Su cuerpo se va incorporando poco a poco a medida que va extendiendo rodillas y tobillos produciendo una descarga de peso sobre la tabla con el fin de facilitar el cambio de cantos necesario para iniciar el siguiente giro. La elevación del cuerpo debe estar coordinada con el impulso rotatorio de hombros y cadera.

Cuando está iniciando el siguiente giro su cuerpo se va poco a poco agachando al flexionar rodillas y tobillos. Este movimiento tiene como fin contrarrestar la fuerza centrífuga producida en el giro lo que permitirá controlar la tabla a la salida de la curva, a la vez que se va aumentando la velocidad.

giros_0

Su ejecución es elegante, eficaz y muy estética.

El giro se produce con los cantos de la tabla. Cuanto más experiencia tengamos mayor inclinación podremos controlar hasta llegar a realizar lo que conocemos por carving o curva conducida.

Practica este tipo de giros. Pronto empezarás a encadenar giros continuados, canteando giros frontside y backside sin descanso. Al principio necesitarás una gran concentración para hacerlo correctamente. Más tarde lo harás de manera inconsciente y tendrás que motivarte añadiendo más velocidad y más inclinación.

Si durante el aprendizaje encuentras alguna pendiente excesivamente pronunciada que te de miedo, no sigas la línea de caída y quítate el temor marcando tú una trayectoria distinta a la de la pendiente.

 

Errores comunes en la ejecución del giro:

– Inclinación del cuerpo hacia atrás con la pierna delantera estirada y la trasera flexionada: esta posición refleja miedo. El centro de equilibrio se encuentra   demasiado atrás por lo que el giro se antoja realmente complicado.
– Inclinación del cuerpo hacia atrás con las piernas estiradas: El snowboarder tiene mucha menos capacidad de movimiento.
– Flexionar el tronco hacia delante: de este modo se acerca el cuerpo demasiado a la nieve desplazando el centro de gravedad al canto de la puntera. Lo más fácil es caerse.
– Cruzar los brazos para intentar girar.

Si tienes problemas para mover la cola de la tabla de un lado a otro, seguramente sea porque te estás inclinando hacia atrás. Debes mantener el peso de tu cuerpo centrado con la mirada dirigida hacia la dirección que quieres seguir. Esto es fundamental.
Giros enlazados

Cuando ya consigues girar a ambos lados intenta encadenar un buen número de giros frontside y backside de la manera que te mostramos en el siguiente video. Cuando lo consigas se puede decir que tienes un gran dominio de la tabla de snowboard. Pero aún se puede ir más allá. Aún te queda dominar al completo uno de los movimientos más llamativos del snowboard: el carving. Disfrútalo en la siguiente lección.